1º Tomar alimentos de origen vegetal, como por ejemplo: patatas, arroz, legumbres, pasta, pan, verduras, frutas y cereales. Como veis en la imagen, estás frutas ya están preparadas para hacer su función, enriquecernos con varios nutrientes importantes para nosotros. No seáis más vagos e id a coger una fruta de la cocina que seguro que os estará esperando y os aseguro que merece la pena disfrutar de tal alimento glorioso. Que lo disfrutéis!! jeje.
2º La carne roja algunas veces al mes. Os explico, tampoco hay que excederse con ello. Sé que están de rechupete los filetitos a la plancha o los filetes de Sajonia pero es lo que hay. No por estar rico debamos hartarnos de ello, lo que debemos hacer es resistir, tener voluntad y comprobaréis por vosotros mismos que al mes tomar carne roja es fabuloso. Porque ya conocéis el dicho: Lo bueno se hace esperar.
3º Consumir semanalmente una cantidad moderada de pescado, preferentemente azul, aves y huevos. Podríais alternar. El mezclar verdura con carne es una buena opción ya que así se consigue una distribuida y no repetitiva comida. Como experiencia propia os recomiendo que mezcléis un día patatas fritas con alitas de pollo. Si queréis experimentar con la distribución yo os animo, así cuando me comenteis aprenderé nuevas recetas.
4º Como cuarta recomendación podríais hacer un poco de ejercicio físico, para hacer trabajar un poco el corazón y mantener en forma nuestras articulaciones y nuestro tono físico. Podríais hacer el recorrido de un parque entero haciendo footing o hacer carrera contínua a un ritmo fijo. Yo cuando me aburro la verdad es que no hago nada, para qué os voy a mentir. Pero siempre tengo ganas de ir a dar una vuelta o correr por un parque o por un minicircuito propio, yo os recomiendo que para no ir solamente escuchando música empezéis a llamar a vuestros colegas para poder correr con ellos y os reaseguro que acompañado se lo pasa uno mejor. Os contaré que cuando yo iba a recorrerme el parque del Oeste de San Fernando lo hacía con un amigo y fue muy gracioso aquel día porque me entró dos flatos y yo quejándome y él riéndose jajajaja. Espero que saquéis vuestras propias anécdotas. Hasta otra.
